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Las situaciones asociadas a drogas se multiplican cada año en los distintos
sectores de la sociedad. Las dinámicas sociales van cambiando y los viejos
paradigmas de trabajo en el campo de los tratamientos por consumo de drogas,
comienzan a perder efectividad. Es por eso que el diseño de nuevas alternativas
de trabajo se hace necesario; un nuevo modelo adecuado a una realidad en
permanente cambio.
El Proyecto de El Emilio surge de una integración de la comunidad
terapéutica tradicional, con la medicina natural y las culturas
originarias. De esta manera ofrecemos las distintas modalidades de tratamientos
con abordaje interdisciplinario contemplando la psicoterapia en sus distintas
formas, el control y seguimiento clínico; integrado a los talleres educativos y
formativos que favorecerán el contacto con la naturaleza y la cultura.
El modelo de la comunidad terapéutica aporta la estructura y la contención
de un abordaje integral, donde la participación de los “pares” dinamiza la
forma de autoayuda en los espacios grupales. La utilización de la medicina
natural tiene como objetivo llevar al mínimo posible, el uso de psicofármacos
en los procesos de tratamiento, favoreciendo, en los casos indicados, un
proceso gradual de deshabituación con seguimiento profesional.
Favorecer el contacto con la naturaleza y la cultura tiene una doble
finalidad, por un lado brindar el beneficio terapéutico de la energía natural y
la apropiación de la cultura; y por otro reforzar el proceso identificatorio de
las personas en tratamiento. Proceso que viene muy deteriorado y marcado por
identificaciones negativas dentro del tramado social.
Creemos que el ser humano como miembro de este universo es pura energía en
movimiento. Las situaciones conflictivas interrumpen este movimiento
energético, cristalizándolo o direccionándolo hacia opciones que lejos de
reencauzar las cosas empeoran el panorama y constituyen la raíz del problema.
El consumo de drogas es una de las respuestas más elegidas por estos tiempos;
el trabajo se centra en incidir en el proceso energético individual para
apuntarlo hacia alternativas creadoras y sanadoras.
Nuestro modelo busca respetar el aspecto individual y
acompañarlo hacia una instancia de crecimiento, tanto interno como externo;
instancia que existe naturalmente en cada uno de nosotros y ha sido olvidada.
Una nueva dimensión que permita liberar las emociones y optimizar el potencial
que tenemos para desarrollar nuestros proyectos de manera concreta y segura;
alcanzando una integración dinámica y productiva a nivel social.